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Mantis II

Segundo entreno de la Saga Mantis. Entrenamientos creados por EasyCorp. MD. para experimentar con nuevas ideas e iniciativas internas. Supuesto del Diario de Joran.

En ésta ocasión, se quiso practicar una patrulla liderada por el Sargento que inevitablemente debía pasar por un control de carretera. Realizándose protocolo de claves de acceso a zona de control. En éste caso, en lugar de ser la unidad entrante la que erraba en comunicación de las claves, era el propio control de carretera el que erraba. Quisimos ver la reacción de dicha patrulla ante tal eventualidad.

 

No informamos al Sargento más que de lo estrictamente indispensable, no conociendo ni tan siquiera de la existencia de un control de carretera, todo debía desenvolverse atendiendo a lo que sucediera:

 

La unidad sujeta al test inició las maniobras con un solo cometido, patrulla rutinaria de un sector muy amplio aliado. Colocando la organización (a la cual calificaré como "nosotros") un control de carretera sospechoso, que fallaba en el protocolo de códigos de entrada, ya que era de doble sentido. Éxito, la unidad entrante detectó el error, hizo caso omiso de los gestos de tranquilidad de los centinelas y buscó ante todo no herir a nadie e hicieron prisioneros sospechosos y susceptibles de ser interrogados y registrados.

 

El registro lo realizaron de forma intrusiva, despojándonos de los mapas, manipulando nuestras radios y sustrayendo nuestras marcadoras y machetes de forma extremadamente cuidadosa, depositándolas en un sitio seguro del control. También encontraron un DIARIO, que era clave para el interrogatorio, en la tienda de campaña. Desde organización, los únicos prisioneros potenciales, nos marcamos decir la verdad ante ciertas preguntas muy claras y lógicas, y en otras requeríamos algo más de amenaza adicional u otorgación de pruebas concluyentes.

Pero, el interrogatorio fue un completo fracaso, se limitaron a amordazarnos ( ya que los dos presos, teatralizando, no parábamos de discutir y gritarnos), por lo que en lugar de separarnos, optaron por mantenernos inmovilizados y callados mientras analizaban las pruebas obtenidas, sobretodo el Diario.

 

El truco estaba en que, de las pruebas obtenidas en el registro se podía intuir claramente la misión a realizar, pero desconocían que sin el interrogatorio iba a ser imposible completarlas del todo.

 

Ante el riesgo de no saber si el interrogado dice o no la verdad, buscábamos en el sujeto al test que preguntara en base al Diario cuestiones sin importancia, y ver la tendencia hacia la verdad de uno u otro preso. O interrogarnos por separado, y ver si decíamos lo mismo o cosas diferentes, ya que era complicado que hubieramos acordado todo previamente para crear una mentira bien organizada. O por ejemplo, ofreciendo "un caramelo" para que uno incriminara a su compañero. Además, para potenciar la apariencia de que el interrogatorio iba a ser útil para ellos, uno de los dos centinelas presos tenía una personalidad más débil ,perceptible claramente, mientras que el otro le amenazaba para que no hablase, por lo que debía ser interrogado y tomado más enserio aquel no éste.

 

De todas formas, nos marcamos los presos la pauta de que solo se podía dar información veraz, siempre que se activase con las preguntas concretas tasadas y exhibiera las pruebas concluyentes. De no activarse simplemente el preso "no dice nada" o mentía En cuanto a las preguntas banales pues había libertad. 

 

 

 

 

 

 

Conclusión: Curiosamente la unidad entrante optaró por desposeer de los objetos personales, que lo achacamos a la enorme confianza que hay en un equipo.. Nos sirvió para aclararles que debería ser de forma no intrusiva en partidas o entrenos conjuntos. En cuanto al interrogatorio, corroboramos que existe una percepción clara a omitirlo por pensar que es irrelevante para la consecución de los objetivos, y en cuanto a la planificación del mismo desde organización, no fue difícil marcarse qué cosas se podían decir y ante qué preguntas/pruebas y de qué forma, pero claro, no estábamos ante una partida de envergadura con multitud de información posible, sino de una simple misión muy tasada.

 

Hemos creído que utilizar interrogatorios como algo habitual entre efectivos sin planificación concisa al respecto se antoja harto complicado, ya sea por la cantidad de normas a crear y necesidad de que todos los jugadores se las estudien al dedillo, por lo que los interrogatorios no guionizados por la organización o discrecionales entre jugadores no los vemos factibles o útiles hoy por hoy (jugador captor vs jugador preso).

 

Redacción Instructor EasyCorp. MD. 2014

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